Debemos observar a las nuevas generaciones para encontrar en ellas el destino de nuestro negocio.
Me contaban la anécdota de años atrás, cuando un grupo de amigos, todos ellos empresarios, charlaban como tales y sobre la mesa estaban los móviles de todos. Había un iPhone y cuatro Blackberry. El hijo del dueño del iPhone se acercó a la mesa y asombrado miró los Blackberry.
Tomó cada uno de ellos y trato de interactuar con los mismos. Nada pudo hacer, tomo el iPhone puso sus dedos sobre el teclado y salió jugando con el mismo. Supieron ver donde estaba el futuro.
Lo mismo sucede hoy con el gremio de la seguridad electrónica. Miran lo técnico, lo complejo. No observamos a las nuevas generaciones buscando en ellas encontrar el destino de nuestro negocio.
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Debemos mirar constantemente al nuevo consumidor.
Perdemos así una brecha importante del negocio, la cual es, el negocio del futuro. Está en ellos el comportamiento del consumidor que debemos observar.
Los factores de cambio están conformados hoy por la Disrupción Tecnológica y por los Nuevos Consumidores.
La disrupción supera el repensar, el reimaginar, el reinventar, ya que la velocidad con que se vuelve obsoleta la tecnología pone en jaque todo tipo de negocio.
Los técnicos hacen cursos en los que terminan manejando controles de acceso, cámaras, sistemas de incendio, pero no hacen cursos de ventas olvidándose de lo más importante, VENDER.
De nada servirá saber manejar toda la electrónica que existe si nos la vamos a llevar a casa.
Vender es lo primero que debemos aprender.
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Teléfono: 0342 4556565
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