Gustavo Beltrán – Director General CAME AMERICAS

“Un diferenciador de CAME, además de la calidad, es que hemos puesto al ser humano en el centro de las cosas. La tecnología que diseñamos está basada en las personas y en su confort, y este confort va de la mano de la seguridad”.

Gustavo Beltrán es un ingeniero industrial y administrador de empresas colombiano, que lleva más de 2 décadas viviendo en los Estados Unidos. Gustavo tuvo el primer contacto con la seguridad cuando trabajaba para la industria azucarera en el Valle del Cauca, Colombia, en donde implementaron el modelo de seguridad industrial. Hace 8 años llegó a CAME en donde hoy es el director general para Las Américas.

La marca.
El grupo CAME tiene su casa matriz en el nordeste de Italia, cerca a Venecia y cuenta con casi 50 años de existencia. En todo este tiempo se han convertido en una marca global líder en el mercado, integrando soluciones de automatización, interfonía, control de acceso y sistemas de estacionamiento entre otros, para el sector público y privado.

El grupo cuenta con una serie de compañías especializadas en todo el mundo, 7 fábricas ubicadas en Italia, Reino Unido, España y Turquía, 480 distribuidores que hacen posible cubrir todo el mercado. En total, son más de 1.700 los empleados de la compañía, 21 oficinas en todo el mundo y en las Américas tienen presencia desde el 2007.

Mercados y soluciones.
Basados en la conglomeración de todas las soluciones que se tienen con las diferentes fábricas especializadas, CAME puede brindar soluciones para muchos mercados verticales. Sin embargo, verticales como aeropuertos, centros comerciales, edificios de oficinas, estacionamientos y conjuntos residenciales es donde la marca tiene su mayor protagonismo.

Así mismo, su abanico de soluciones es amplio, pero también sobresalen soluciones que son bandera para la compañía y que representan un foco importante de sus negocios. En este caso es importante mencionar la solución con la que empezó la compañía, que son las automatizaciones (motores para portones batientes y deslizantes). Luego de este producto con el que inició la compañía, se integran las barreras automáticas para los sistemas de estacionamiento. Con los años, la empresa comienza a crecer y a comprar y fusionarse con otras empresas dentro de la “sombrilla” CAME. Esto le permite empezar a ampliar su portafolio, con Torniquetes (CAME Ozak, Turquía), -Bolardos (CAME Urbaco, Francia), Sistemas de Estacionamientos (CAME Parkare, España) entre otros aliados que les permiten tener amplias y mejores soluciones para sus canales.

Latam.
CAME es muy fuerte en los mercados más grandes de América, incluyendo los Estados Unidos. Específicamente en Latam, se pueden destacar Brasil, República Dominicana, Costa Rica y México, en donde por mencionar un dato relevante podemos hablar de que se tienen más de 30 aeropuertos con soluciones CAME en este último país.

Así mismo, se están evaluando subsidiarias en Colombia, y fortalecer oficinas como las de Chile y Perú, entendiendo que con el alcance que tiene la compañía en la región, aún se puede seguir creciendo en algunos lugares.

Lo que viene.

“Uno de los principales retos será la migración de nuestras tecnologías a 5G, entendiendo que los ritmos de el grupo europeo son distintos a las Américas”.

El futuro del mercado para nosotros estará en seguir desarrollando tecnologías IOT. De hecho, en CAME ya se están haciendo desarrollos que facilitan el trabajo de los integradores, ya que pueden “setear” los equipos vía bluetooth. En esta misma línea, se piensa en el usuario final, que desde una app pueda controlar todo, con acceso remoto en tu bolsillo, desde cualquier parte del mundo y con seguridad.

Además del gran reto mencionado del 5G, Gustavo no desconoce “la nueva normalidad”, es un reto asociado a la pandemia en el que hay que trabajar muchas veces de manera diferenciada porque los clientes tienen la necesidad de implementar o hacer cambios en los controles de acceso para las industrias.

“Ya lo estamos viviendo; se nos están acercando mucho más los instaladores o integradores que tienen proyectos nuevos para la parte de control de acceso y que tienen condiciones específicas de esta nueva normalidad, en las que los torniquetes deben estar integrados con lectores térmicos, de reconocimiento de máscaras y biometría facial o del iris”.

CAME, está buscando acercarse más al integrador directamente, porque así puede haber un valor agregado en educación, certificación y en nuevas estrategias para entregar el producto de la mejor manera al cliente.

El futuro del mercado para nosotros estará en seguir desarrollando en tecnologías IOT. De hecho, en CAME ya se están haciendo desarrollos que facilitan el trabajo de los integradores, ya que pueden “setear” los equipos vía bluetooth. En esta misma línea, se piensa en el usuario final, que desde una app pueda controlar todo, con acceso remoto en tu bolsillo, desde cualquier parte del mundo y con seguridad.

“Estamos haciendo alianzas estratégicas con socios ALAS, para poder integrar el cerebro, pensado desde el control de acceso, con nuestros perimetrales y soluciones”.

La Asociación:
“Desde que he estado en la industria he sido parte de ALAS, hoy y por los 2 próximos años, incluso desde la mesa directiva como tesorero. Estar en la asociación más importante de Latam me hace entender que el papel de ALAS es acercar cada vez más a cada uno de los actores a los mercados, generar unión, y verdaderas relaciones.

Uno de los grandes pilares de ALAS es la parte educativa, y como Asociación quisiera que nos hagamos muy fuerte en ello. Siendo también un puente con otras asociaciones y expertos en distintos países, generando accesos”.